Nunca se olvida el arte de tejer mundos en las estrellas,
de tener la luna dentro de la cabeza...
y en mi cabecita siempre hay luna llena...

jueves, 30 de agosto de 2012

LUZ EN LA ENCRUCIJADA

    

    Para muchos de los que entran en este bar canalla, soy como la farola que ilumina el cruce de caminos. Gracias a que los alumbro son capaces de leer las señales de sus encrucijadas. En mi comprensivo silencio sienten la calidez de la confianza y bajo la protección de mi mirada encuentran fuerzas para tomar una decisión, para tomar partido por uno de los destinos que tienen enfrente. Giran a la derecha, o a la izquierda, siguen recto o vuelven sobre sus pasos. Es lo de menos. Eso ya no depende de mí.
 
   Cada noche me siento sola en una esquina de la barra. Los veo entrar. Todos me miran. Unos pocos se me acercan, se sientan junto a mí, me cuentan su historia, que en ese momento empieza a formar parte de la mía, y cuando se marchan ya no están perdidos. 

    Cada noche, después de alumbrar a unos cuantos desesperados, me quedo sola en una esquina de la barra. Mi destino es permanecer aquí, igual que esa farola en el cruce de caminos, que da luz a la encrucijada. Esa misma luz la ciega y la condena a no poder leer las señales para elegir su camino y caminar.

APOLONIA

domingo, 25 de marzo de 2012

MI VECINO EL ESCRITOR

La foto es de aquí
    “El artista en su trabajo debe ser como Dios en su creación, invisible y todopoderoso. Debe sentírsele en todos los sitios, pero no debe ser visto.”



Gustav Flaubert


    Tengo un vecino que es escritor y me da pena que esté tan flaco. No es que no tenga éxito, es que no sabe ni ahorrar ni cocinar. Por eso cada mañana, antes de irme a trabajar, bajo a comprar pan y leche, preparo un desayuno para dos, lo pongo en una bandeja con el periódico, unas flores también, y llamo a su puerta. Es la mejor parte del día para mí.
    Escribe sobre todo poesía. Pero la poesía no le reporta muchos beneficios. Así que malvive con lo que le queda de las ventas de sus tres novelas. Me gustan mucho sus novelas, pero me gusta más que me lea sus versos, que me busque a horas intempestivas para contarme una imagen o un sueño, y que me recite de memoria cogiéndome las manos y mirándome a los ojos.
    Hoy se ha abalanzado sobre las tostadas con un ansia poco habitual en él. Las ha devorado a toda prisa mientras me contaba que las musas lo visitaron anoche. Se ha despertado inquieto de madrugada, con la sensación de tener una jaula de grillos en la cabeza, y ha tenido que ponerse a escribir de inmediato, para no olvidar el argumento de lo que será su próxima novela. Las ideas se le atropellaban, los personajes se empujaban unos a otros y no conseguía teclear con la suficiente velocidad.
    Ya conozco la historia. Será la cuarta vez que la vivo. Ahora estará una temporada imposible, inaccesible, arisco de prepotente y ni siquiera me mirará. En cuanto termine con el argumento se lo llevará a su agente. A su agente le encantará, como siempre. Le dará un adelanto, como siempre. Se lo gastará en rubias, copas y cenas, como siempre. Se sentirá, y será, omnipotente, tanto dentro de su relato con las palabras, como fuera de él con el dinero del adelanto. No tardará mucho en dejar colgado el trabajo, todo para mañana, porque sólo se vive una vez. Parece que para él vivir consiste en irse de juerga. Se le pondrán la cara y la nariz coloradas, bien acompañadas por la risa estúpida del borracho crápula. Cuando queden un par de días para que termine el plazo para entregar el borrador, acabará con prisas, de malas maneras, y dibujará un final precipitado con los personajes en situaciones absurdas e ilógicas. Su agente le echará la bronca, así que no le quedará más remedio que encerrarse en casa y ponerse a escribir en serio.
    Cuando llegue el momento, cuando esté desesperado, me buscará. Se cruzará de forma accidental conmigo en la escalera. Me dirá que cuánto tiempo, y me invitará a un café en su casa. Me dará un abultado montón de folios sucios para que le diga mi opinión. Otra vez habrá adelgazado, porque es incapaz de perder tiempo en prepararse algo de comer, además de que se habrá fundido ya todo el dinero y no podrá tampoco ir de restaurantes. Lo trataré con frialdad, porque estaré enfadada, pero no tengo remedio, y volverá a darme pena que esté tan flaco. A la mañana siguiente llamaré a su puerta con el desayuno, el periódico, unas flores, y el texto corregido. Por supuesto, me prometerá una cena que nunca llegará, porque en cuanto su agente le de el resto del dinero, volverá a las rubias, a las copas, y a esas cenas donde yo sobro.
    Nunca le dura mucho esta fase. Es derrochador y demasiado generoso con los conocidos por accidente en las barras de los bares. Se siente Dios durante el tiempo que lo posee la febril inspiración inicial, y hasta que se le acaban las presentaciones, los viajes, las rubias, las copas y las cenas. Luego vuelve siempre a casa a refugiarse en su poesía, y a refugiarse en mis desayunos y mi sosa presencia silenciosa.

APOLONIA

jueves, 15 de marzo de 2012

HEAVY DE CIUDAD


    Los tres chavales picaron y aceptaron la apuesta. Se rieron con ganas de Carlos, porque estaban muy seguros de que no sería capaz de ligarse a la camarera, y mucho menos de tirársela como afirmaba. La conocían bien. Ellos eran del pueblo, y Carlos sólo un forastero que andaba de paso. Se lo tenía muy creído. Sabía mucho de música y de cómo beber birras, pero lo que no sabía es que aquella tía, que sólo estaba tras la barra los fines de semana por echarle una mano al dueño y beber gratis, estudiaba en la universidad y se había echado un novio allí en la ciudad. Desde entonces, aunque todos la perseguían, nadie había conseguido nada que no fueran aquellas sonrisas con las que acompañaba las copas.
   

    Se pusieron los cuatro a comentar lo buenísima que estaba. Una pelirroja con mallas de colores y el pelo en dos trenzas hasta la cintura, hippie tras la barra de un bar heavy, no podía pasar desapercibida. Luego irían a buscar a los otros, que estaban con la partida de futbolín. No les perdonarían si no los avisaban de que esa noche era ella la que ponía las cervezas.
   

    Decidieron caldear un poco el ambiente y pidieron unas jarras con chupito dentro, unos submarinos de peppermint. Mientras se los bebían le decían a Carlos que era un pringao, que no tenía la más mínima posibilidad, que la tía era muy maja, pero que le sonreía a todo el mundo. Sin embargo, Carlos se terminó de trago la cerveza, los miró con sorna y se fue a la esquina donde ella trasteaba con los vinilos.
   

    Se acercó preguntándole algo sobre el disco que sonaba en ese momento. Desplegó toda su sabiduría musical y le dijo que la invitaba a tomar algo. Ella aceptó sin remilgos, le sonrió, puso una botella sobre la barra y le preguntó qué disco quería que le pusiera a cambio. Hablaban por debajo del sonido de la música, con lo cual los tres chavales no podían oír lo que decían. Sólo cogían algunas palabras sueltas, con las que no podían saber cómo iba la cosa. Lo que les llegaba bien claro eran las carcajadas de ella, pero siempre se reía con ganas, así que eso no significaba nada.
   

    Dos chupitos de tequila y muchas risas después, Carlos la dejó con los discos y se acercó de nuevo a ellos. En la cara llevaba escrito “ya está hecho”. Los tres lo miraron y se rieron. La tía sólo había sido agradable con él y se había echado unos tragos a su costa. La llamaron para pedirle otra ronda. Esta vez los submarinos que fueran de wisky, que pagaba el forastero, por pringao y por fantasma. Pero tuvieron que pagar ellos, además de tragarse todo lo que habían dicho, porque la camarera se acercó contoneándose, con ojos sólo para Carlos, y le dijo que estaba sola en casa esa noche, que lo invitaba, que quería comprobar si era capaz de hacer lo que le había contado.
   

    Empezó a llegar gente. Ellos, todavía sin recuperarse de la sorpresa, no dejaban de pedirle detalles de cómo lo había hecho. ¿Qué le había dicho?. Después de cobrar la apuesta y fanfarronear un rato, se apiadó de ellos y les dijo que él era el novio de la pelirroja, que les habían tomado el pelo. Habían aprovechado el que no lo conocía nadie, porque era la primera vez que iba al pueblo. La camarera se dio cuenta de la confesión y puso una gratis para suavizar la noticia.
   

    Los tres, más torcidos que otra cosa por las cervezas y los chupitos de más, pero no enfadados, se fueron a buscar a sus amigos al futbolín. Llevaban idea de recuperar lo perdido. Si ellos habían tragado, tragaría cualquiera. Para cuando volvieron al bar, no estaban ni Carlos ni ella, y encima tuvieron que aguantar las bromas del dueño, que a partir de entonces no les dejó olvidarse de que les había timado un heavy de ciudad.

APOLONIA

martes, 13 de marzo de 2012

JITANJÁFORA 28: RAYMOND CARVER

Domingo, 11 de MARZO de 2012
El VIGÉSIMO OCTAVO programa. 
RAYMOND CARVER




"Tú no eres tus personajes, pero tus personajes son tú"

Raymond Carver fue un escritor estadounidense al que se ubica dentro del movimiento del realismo sucio, con un estilo minimalista. En sus cuentos adoptó una perspectiva irónica y melancólica sobre historias y personajes cotidianos.
"la nada cotidiana"

Pero antes, estuvimos leyendo las aportaciones recibidas al reto de la Antiprosopopeya.
Colaboraron con nosotros: INDALECIO, MARÍA, PEPÍN, EL MELGARES, ANDREA Y PEPA.
Como es muy largo poner aquí los textos íntegros, os dejo que escuchéis el programa. ¡Menudo nível!

De fondo, la maravillosa voz de ELLA FITZGERALD



DADLE AL PLAY:




CUENTO
(Música de fondo La mer de Debussy )

MI TAZA
por Apolonia 
PINCHA aquí PARA LEERLO


Nos despedimos escuchando "Satin Doll" de Duke Ellington

¡Os espero en la próxima jitanjáfora!

¡¡Besiños!!
APOLONIA

MI TAZA

"El beso" de Gustav Klimt

    El camión por fin se metió al carril de la derecha. Le había costado más de diez minutos pasar al otro camión. Lo adelantó y dejó que la pasaran todos. Se había creado una buena fila de coches. Muchos conductores, nerviosos, aceleraron de forma brusca. Ella se limitó a subir la música y mirar al frente. Ya quedaba poco para el desvío.
 
    El desayuno le bailaba en el estómago. Se lo notaba revuelto. Sólo se había tomado una taza de té negro, como todas las mañanas. En la oficina desayunaría mejor. Otro té y algo de comer. Había pasado mala noche. Tuvieron discusión antes de acostarse. Una nadería, como siempre. Pero a ella, fuera por lo que fuera, siempre le quedaba un rastro de bilis. A las cuatro de la mañana ya estaba despierta, con los ojos abiertos, sin poder dejar de mirar los dígitos rojos del despertador, y sin moverse por no despertarlo a él. Le dolía la cintura de tener todo el peso de su brazo sobre ella. Al final había conseguido, poco a poco, escaparse de la presión, y se había levantado, demasiado temprano. Había mirado por la ventana como se aclaraba el patio interior. Se veían algunas luces en el edificio de enfrente. Conforme pasaban los minutos se encendían más. Cuando escuchó como se levantaban sus vecinos de arriba, decidió meterse a la ducha.
 
    Otro camión. Pero le faltaba muy poco para el desvío esta vez, así que no lo iba a adelantar. ¿Para qué? Llegaba pronto, como todos los días. Al entrar en el carril de desaceleración se vio a sí misma, de pie en la cocina. Se puso de nuevo a verter el agua caliente en su taza. Estaba vieja esa taza, como todas las demás. Ya sólo podía verse media cabeza de Marilyn, y los colores estaban descoloridos. Habían llegado más tazas después, pero siempre usaban las mismas: ella la de Marilyn y él la de las jirafas sin cabeza.
 
    En el trabajo se puso otro té. Esta vez un té verde. Nunca tomaba café. Lo había dejado en el primer año de universidad, cuando se conocieron. Su taza favorita humeaba sobre la mesa. Su taza favorita por llevar impresa una reproducción de “El beso” de Gustav Klimt. La cogió con las dos manos, para calentárselas. Hacía frío a primera hora en la oficina. Al poco le entró un mensaje de correo. Él le pedía perdón por lo de la noche anterior. Lo perdonó, por supuesto. Ni siquiera estaba enfadada. Sólo le dolía la cabeza por la falta de sueño, así que decidió hacerse otro té. Esta vez uno negro con canela. Pero primero tenía que lavar la taza y la bolita metálica para que no se mezclaran los sabores. Al ir a entrar en el baño se desprendió el asa de la taza y se estrelló contra el suelo rompiéndose en mil pedazos. Una compañera vino a ayudarla a recoger. Le dijo que era una pena, su taza favorita, una pena. Y ella le contestó sonriendo, que no era importante, que sólo era una taza.
 
    Por la tarde al llegar a casa el fregadero estaba lleno de vajilla sucia. Se puso a fregarla. Y cuando terminó, se puso a lavar todas las tazas. Las dejó para que se secaran sobre un paño de cocina en la encimera. Él no había llegado todavía. Hoy saldría tarde del trabajo y al salir tenía algo que hacer para alguna de las mil historias en las que estaba metido. Encendió un cigarrillo. Miraba las tazas secarse. Demasiadas tazas, demasiado chillonas, demasiado estridentes. Actores, actrices, escenas de películas, personajes de dibujos animados. Abrió el grifo para apagar el cigarro, tiró la colilla al cubo de la basura y, una por una, rompió todas las tazas contra el suelo. Sin rabia. Sólo las cogía y las dejaba caer. La vecina de abajo subió a ver qué pasaba. Le dijo que tranquila, que un mal día, que había necesitado romper algo. La vecina la entendía. Vaya si la entendía. Si necesitaba hablar sólo tenía que bajar.
 
    Después de recoger el estropicio se fue de compras. Al volver él ya estaba en casa.

—¿Qué ha pasado con las tazas?
—Las he roto. Me cansaba de verlas. Ya no somos unos críos para andar con el té en unas tazas tan infantiles.
—Pensaba que ibas a decir que “se habían roto”, no que “las habías roto”
—¿Acaso tienes ganas de discutir otra vez?
—No, ni de lejos.
—Esta bien. He comprado tazas nuevas.
 
    Sacó casi una docena de tazas, todas de colores suaves, y con algún detalle delicado, minimalista.

—¿Te gustan?
—Me gustaba mi taza de jirafas descabezadas.
—Esa no la he roto.
Abrió el armario de arriba del todo, sacó la taza y se la dio.
—¿Qué te apetece para cenar? He comprado algo de pescado.
—Lo que quieras, como siempre.

    Al día siguiente, camino del trabajo, iba contenta. Tranquila, a su marcha, apenas veía ni oía a los otros coches. Sólo veía las nubes, y de vez en cuando echaba una ojeada al asiento del copiloto. Allí, envuelta en papel de regalo, con una pegatina donde ponía “porque te lo mereces”, estaba su taza favorita, con una reproducción impresa de “el beso” de Gustav Klimt.

APOLONIA

RADIONOVELA INTERACTIVA DE LA ENREDADERA CAPÍTULO 13

¡Ya está aquí el DÉCIMOTERCER episodio!
Un capítulo hilarante, con nuevos personajes como Fluvi, un feto o el alcalde de Zaragoza, y que contó con nuevas voces. ¡ Andrea y El Melgares! ¡De lujo! Ahora te toca a ti seguir la historia de “La J15MJ: el amor no entiende de clases”. ¡Todo cabe!, así que no te cortes y propón alguna idea hacia el capítulo 14.Si quieres colaborar con tus ideas, ya estás tardando.

En “La J15MJ: el amor no entiende de clases”,tú decides lo que ocurrirá ahora.

¡¡A tí, que nos escuchas y lees te toca poner un comentario para decirnos cómo quieres que siga esta historia!! ¡Cualquier aportación será bien recibida! En una semana, cogeremos todas las sugerencias y elaboraremos el 14º episodio. Ya sabes, en la web de la enredadera nos puedes dejar tus ideas.

Si pinchas en la foto irás al enlace de la página web de LA ENREDADERA donde puedes colaborar con nosotr@s.



De momento, te dejo con... tachan tachan... ¡EL décimotercer CAPÍTULO DE LA RADIONOVELA INTERACTIVA DE LA ENREDADERA!

Escucha, escucha...




¡Anímate a participar!

APOLONIA

viernes, 2 de marzo de 2012

RETO: ANTI-PROSOPOPEYA

Hace ya dos jitanjáforas de tiempo. Hace ya tiempo del último reto planteado y que volví a recordar en el programa de este domingo: UNA ANTI-PROSOPOPEYA.
¿Y qué es esto me preguntaréis? Pues lo contrario de una prosopopeya, en las que suponíamos comportamientos o características humanas a objetos, sensaciones, fenómenos, animales, ... Y ahora de lo que se trata es de "cosificar" o "animalizar" a una persona.
Os he dejado el ejemplo de Eduardo Manostijeras en la ilustración de la entrada. Pero las posibilidades son infinitas. ¿No os parece divertido?

Venga, animaos a participar. Todo vale. Dejad volar la imaginación. Ya sabéis que leeré todos los textos en antena. Tenéis de tiempo para enviarlos hasta el viernes 9 de Marzo. ¡No más de 50 palabras!, para que haya espacio para todos.

Leeré lo que me enviéis en el programa del 11 de Marzo.

¿Qué cómo me los podéis hacer llegar?

Los podéis dejar aquí en forma de comentario, o mandando un mensaje, ya sea a través del facebook (para quienes seáis mis amiguitos), o a través del correo electrónico a cualquiera de las direcciones siguientes, indicando en el asunto "Colaboración Jitanjáfora: anti-prosopopeya":

esencialsiempre@gmail.com
laenredadera@nodo50.org

También podéis dejarlo en la página web de "La enredadera". Tenéis el enlace aquí al ladito, pinchad encima y ya está.

Besiños!!
APOLONIA

miércoles, 29 de febrero de 2012

RADIONOVELA INTERACTIVA DE LA ENREDADERA CAPÍTULO 12



¡Ya está aquí el DÉCIMOSEGUNDO episodio!
¡y YA ESTÁ LÍADA!, jejeje.
Edurne despendolada con la madre biológica de Pili, Pablo enamoriscao y agilipollao, Pili y Javi cabreaos, ... se acaban juntando todos, fachas incluídos, aparecen la poli y los marcianos, y ... mejor será que lo escuches.

Si quieres colaborar con tus ideas, ya estás tardando.

En “La J15MJ: el amor no entiende de clases”,tú decides lo que ocurrirá ahora.

¡¡A tí, que nos escuchas y lees te toca poner un comentario para decirnos cómo quieres que siga esta historia!! ¡Cualquier aportación será bien recibida! En una semana, cogeremos todas las sugerencias y elaboraremos el 13º episodio. Ya sabes, en la web de la enredadera nos puedes dejar tus ideas.

Si pinchas en la foto irás al enlace de la página web de LA ENREDADERA donde puedes colaborar con nosotr@s.



De momento, te dejo con... tachan tachan... ¡EL undécimo CAPÍTULO DE LA RADIONOVELA INTERACTIVA DE LA ENREDADERA!

Escucha, escucha...



¡Anímate a participar!

APOLONIA

JITANJÁFORA 27: DISTOPÍAS

Domingo, 26 de FEBRERO de 2012
El VIGÉSIMO SÉPTIMO programa. 
DISTOPÍAS



LA FOTO ES DE AQUÍ

Una DISTOPÍA, también llamada "antiutopía", es una utopía perversa donde la realidad transcurre en términos opuestos a los de una sociedad ideal. Los textos basados en distopías surgen como obras de advertencia, o como sátiras, mostrando las tendencias actuales extrapoladas en finales apocalípticos. Algunas se nos presentan como utopías en su visión superficial, y vamos descubriendo que mantiene ocultas sus características distópicas, las cuales resultan indispensables para su funcionamiento.

De esto y mucho más estuvimos hablando en la última jitanjáfora.

De fondo, la banda sonora de la película  LA NARANJA MECÁNICA 



Y unas recomendaciones de lectura:  
"1984" de George Orwell


"Fahrenheit 451" de Ray Bradbury


"Un mundo feliz" de Aldous Huxley





DADLE AL PLAY:




CUENTO
(Música de fondo La mer de Debussy )

EL VESTIDO AMARILLO
por Apolonia 
PINCHA aquí PARA LEERLO


Nos despedimos escuchando "Satin Doll" de Duke Ellington

¡Os espero en la próxima jitanjáfora! y HAY RETO. En breve lo colgaré como entrada para que podáis participar con vuestros comentarios, pero si alguien quiere ir pensando algo, se trata de hacer una ANTIPROSOPOPEYA, o de atribuir propiedades de cosas o animales a una persona. Es decir, "cosificar" o "animalizar" a alguien.

¡¡Besiños!!
APOLONIA

RADIONOVELA INTERACTIVA DE LA ENREDADERA CAPÍTULO 11



¡Ya está aquí el UNDÉCIMO episodio!
¡y LA QUE SE VA A LIAR!, jejeje.
Hoy entra en juego el aborto y todo... madre mía... y los cambios de sexo.

Si quieres colaborar con tus ideas, ya estás tardando.

En “La J15MJ: el amor no entiende de clases”,tú decides lo que ocurrirá ahora.

¡¡A tí, que nos escuchas y lees te toca poner un comentario para decirnos cómo quieres que siga esta historia!! ¡Cualquier aportación será bien recibida! En una semana, cogeremos todas las sugerencias y elaboraremos el 12º episodio. Ya sabes, en la web de la enredadera nos puedes dejar tus ideas.

Si pinchas en la foto irás al enlace de la página web de LA ENREDADERA donde puedes colaborar con nosotr@s.



De momento, te dejo con... tachan tachan... ¡EL undécimo CAPÍTULO DE LA RADIONOVELA INTERACTIVA DE LA ENREDADERA!

Escucha, escucha...



¡Anímate a participar!

APOLONIA

JITANJÁFORA 26: CREACIÓN DE PERSONAJES

Domingo, 12 de FEBRERO de 2012
El VIGÉSIMO SEXTO programa. 
LA CREACIÓN DE PERSONAJES


EL GRAN MASTURBADOR
Salvador Dalí


Hay tantas maneras de presentar un personaje en una historia como puntos de vista o intenciones.
Estuvimos hablando de sensaciones, de confianza, de visibilidad, de naturalidad, de que debemos saberlo todo de nuestros personajes, de la ficha de personaje, de prosopografía, de etopeya, de figuras retóricas y mucho más.
Habíamos propuesto el reto de crear un criminal en el programa anterior, y estas son las aportaciones recibidas:
EL CRIMINAL

GOE
Santi alias "el indalecio" es un criminal de los de más baja estofa, moralmente hablando. Sus métodos son brutales y crueles, Y Pina de Ebro vive aterrada por su culpa.

El indalecio tortura obligando a escuchar villancicos tales como "los peces en el río" una y otra vez(dando al botón "repeat"). Se oyen los niños cantando con esas voces tristes y descoordinadas:

"la virgen se está peinaaaaaaandooo entre cortina y cortiiiiiiina" y la victima ha sido previamente despojada de su lengua para que sus gritos no amortigüen la terrible grabación. Luego el indalecio le dice que Chefo no mola nada…¡Y eso nadie lo soporta! Porque a Chefo le quiere todo el mundo y es muy duro que te digan que no mola…pero como no tiene lengua no puede responder. La tortura más terrible es cuando el indalecio le dice a la victima que Chefo no existe, que es una ilusión de su mente. Le convence con falaces argumentos y esto le ocasiona una gran desilusión. Todo esto le ocasiona la muerte y el indalecio convierte el cuerpo en comida para sus peces.

Como ves Pum, el indalecio es uno de los peores villanos, ya que si no crees en Chefo, no hay motivación ni ilusión ni ganas de nada. El indalecio es un gran psicólogo, pero por desgracia usa su sabiduría para el mal.

INDALECIO
Mi criminal personalizado es apodado El Neoliberal. En el fondo el no se cree un criminal ni que haga nada malo, ya que para el la economía está por encima de todo. Su actividad no está claro si comenzó en 2008 o 2009. Obsesionado en acabar con la crisis y el paro secuestra parados y los pone a luchar a muerte entre ellos. Organiza apuestas y los beneficios que obtiene lo dona a los bancos más pobres.
Vamos, un Robin Jud, pero práctico.

BURBUJA
"Sé quien eres, donde vives, lo que te gusta...lo sé todo sobre tí. La próxima vez que dobles la página de un libro, lo uses para calzar una mesa o derrames café sobre sus páginas, no tendré piedad, será tu sangre la que se derrame. Dicen que soy una criminal, yo simplemente imparto justicia. Firmando: La bibliotecaria asesina."
Es una fantasía de cuando estudiábamos en Filosofía, inventamos el personaje en la biblioteca, al ver como el personal devolvía los libros.

EL MELGARES
El malvado personaje que os presento parece sacado de un catálogo de villanos:
Oscuro, retorcido, egoísta y avaro.
Viste una chistera gastada y un gabán color carbón.
Solo sale de noche y oculto entre las sombras comete sus fechorías.
Hasta aquí nada original, ¿verdad? Una burda copia de Jack el destripador y de otros tantos. Pero lo curioso de este personaje no es su aspecto, si no a qué se dedica, el hombre del gabán, al anochecer, sale de su casa y recorre las calles en busca de sus presas, los hombres, en busca de su alimento, las esperanzas y los sueños. En cuanto su fino olfato detecta un atisbo de alegría o de ilusión, el hombre del gabán se quita su chistera y toda la luz que habitaba en su victima es absorbida en el interior del sombrero.
Y así todas las noches, desde el principio de los tiempos.
Tened cuidado y guardad bien vuestros sueños, porque el hombre del gabán ya no encuentra victimas con tanta facilidad y está hambriento.




De fondo, la banda sonora de la película  CONAN EL BÁRBARO DE "Basil Poledouris"


Y una recomendación de lectura: "EL RETRATO DE DORIAN GRAY" de Oscar Wilde



DADLE AL PLAY:




CUENTO
(Música de fondo La mer de Debussy )

LA BIBLIOTECARIA
por Apolonia 
PINCHA aquí PARA LEERLO


Nos despedimos escuchando "Satin Doll" de Duke Ellington

¡Os espero en la próxima jitanjáfora!

¡¡Besiños!!
APOLONIA

viernes, 10 de febrero de 2012

AGUSTÍN


Ilustración de "Fernando Falcone"

Agustín siempre protesta por todo. Es su costumbre. Y con esa costumbre, como acaba contradiciéndose tarde o temprano, se ha ganado el apodo de “ el veleta” aquí en el trabajo, que aunque no es muy original, sí que define su forma de ser bastante bien.

Agustín, además, siempre está a favor de vaguear, de lo cual no parecen darse mucha cuenta los jefes. O igual es que lleva en la empresa más tiempo que ellos. No nos molesta que haga el vago delante del ordenador, pero es una tortura cuando le ves acercarse con alguna excusa tonta, porque sabes que además de hacerte perder el tiempo, te va a poner dolor de cabeza con sus múltiples quejas: que si el horario, que si la temperatura, que si las corbatas, que si la marca de los bolis, que si el tráfico, ... porque siempre está en contra de todo: del horario de mañana, del horario de tarde, de la jornada continua, de que alguien encienda el aire acondicionado, de que nadie encienda el aire acondicionado (también se podía levantar él), de que Jaime lleva corbata, de que Arturo no lleva corbata, de que no hay bolis negros, de que la semana pasada todo eran bolis negros, de que está mañana había mucho tráfico, de que ayer no había nada de tráfico e iba él solo por la autopista,...

Todas las mañanas, a la hora del café, llega el primero a la máquina del descansillo y se marcha el último. Todas las mañanas nos pone al día de las noticias, a pesar de que se nos nota a todos que no lo aguantamos, porque justo antes del descanso, se lee de cabo a rabo un periódico concreto. Siempre está a favor de las opiniones mostradas en él, sean las que sean. Siempre de acuerdo con las “verdades” que muestra en las noticias, sean las que sean, aunque tenga, con respecto a un mismo tema, tres versiones y tres posturas diferentes a los largo de la semana. Todos suponemos que será porque siempre está en contra de pensar por uno mismo.

Agustín no sabe que estamos recogiendo dinero para hacerle un regalo, con el cual esperamos que se de cuenta de que todos estamos a favor, y siempre estaremos a favor, de que le echen de comer aparte.
APOLONIA

jueves, 2 de febrero de 2012

EL SUEÑO DE UNOS POCOS VIEJOS


Portada de "El sueño de un millar de gatos"

MI PEQUEÑO HOMENAJE A NEIL GAIMAN

Se resisten. Nos resistimos. No queremos que todo muera, que los árboles hagan suyas las casas que tanto trabajo nos costó construir, en pelea con el viento, con la lluvia, con el frío, con el hielo de las madrugadas. Estamos viejos y solos. Cada vez quedamos menos. Nos habíamos resignado a lo que parece inevitable, pero ahora todos estamos de acuerdo en que no es una locura tener esperanza. No se pierde nada por intentarlo. Lo más importante es que creamos en ello, que creamos que es posible. Y lo creemos. Vamos a soñar, juntos, todos a una, y todos lo mismo. Volverá a ser como antes, porque los sueños dan forma a la realidad. Me lo contó mi nieto. Me contó que antes el mundo era  de los gatos, que eran gigantes, que hablaban, pensaban, y que nosotros éramos sus esclavos. Que un día un hombre se dirigió a los demás hombres y les dijo: “¡Soñad! ¡Si lo soñamos los suficientes ocurrirá”. Y ocurrió. No hicieron falta muchos. Soñaron y al día siguiente las cosas cambiaron. No soñaron el mundo con la forma que tiene ahora, sino que soñaron el mundo de forma que siempre fue como es ahora: los gatos pequeños, los humanos los dueños. Cambiaron el universo desde el principio de todas las cosas hasta el fin del tiempo. No hacemos falta muchos. El sueño de unos pocos viejos. He corrido la voz y esta es la noche. El pueblo entero duerme, la montaña entera duerme. Falto yo. ¡Soñad! Porque todas las noches los sueños crean el mundo y esta creará el nuestro. ¡Soñad! Esta noche seremos los suficientes y mañana las cosas habrán cambiado. Vamos a soñar para que mañana el universo, nuestro universo, nuestro pueblo, nuestra montaña y nosotros mismos, sean y seamos como debería ser, porque habrán y habremos cambiado desde el principio de todas las cosas hasta el fin del tiempo. Soledad, abandono, vejez y decrepitud desterradas. ¡Soñad! Los sueños dan forma al mundo. El sueño de unos pocos viejos.
APOLONIA

lunes, 30 de enero de 2012

JITANJÁFORA 25: SHERLOCK HOLMES

Domingo, 29 de ENERO de 2012
El VIGÉSIMO QUINTO programa. 
LA NOVELA POLICÍACA EN GENERAL Y SHERLOCK HOLMES EN PARTICULAR



Sherlock Holmes está de moda ¿lo sabías?
Y ¿qué sabes tú de él?
¿Sabías qué...?
  • el personaje de Sherlock está basado en un profesor de medicina y un compañero de facultad de Sir Arthur Conan Doyle
  • Sherlock nunca dijo "elemental querido Watson" en las novelas
  • el hermano de Sherlock, Mycroft, era mucho más inteligente que él
  • Moriarty apenas aparece un par de veces en los relatos
  • ...

De fondo, la banda sonora de la película de Billy Wilder "La vida privada de Sherlock Holmes"



DADLE AL PLAY:





CUENTO
(Música de fondo La mer de Debussy )

LAS MOSCAS MUERTAS HABLAN
por Apolonia 
PINCHA aquí PARA LEERLO


Nos despedimos escuchando "Satin Doll" de Duke Ellington
y PLANTEANDO UN RETO: crear un criminal original. ¿Te atreves? 

¡Os espero en la próxima jitanjáfora!

¡¡Besiños!!
APOLONIA

RADIONOVELA INTERACTIVA DE LA ENREDADERA CAPÍTULO 10


Imagen sacada de la frikipedia

¡Ya está aquí el DÉCIMO episodio!
¡y cómo siempre cargado de sorpresas...!, jejeje.
Esto ya es un culebrón: Edurne se declara lesbiana, Pili sigue adelante con el embarazo, y eso que descubre que se ha quedado embarazada de su hermano,... En este episodio, el padre de Pili, Tomas, y Pablo, toman sendas decisiones que no sabemos donde irán a parar.  ¡Y hasta sale la tuna de empresariales!

Si quieres colaborar con tus ideas, ya estás tardando.

En “La J15MJ: el amor no entiende de clases”,tú decides lo que ocurrirá ahora.

¡¡A tí, que nos escuchas y lees te toca poner un comentario para decirnos cómo quieres que siga esta historia!! ¡Cualquier aportación será bien recibida! En una semana, cogeremos todas las sugerencias y elaboraremos el 11º episodio. Ya sabes, en la web de la enredadera nos puedes dejar tus ideas.

Si pinchas en la foto irás al enlace de la página web de LA ENREDADERA donde puedes colaborar con nosotr@s.



De momento, te dejo con... tachan tachan... ¡EL décimo CAPÍTULO DE LA RADIONOVELA INTERACTIVA DE LA ENREDADERA!

Escucha, escucha...


¡Anímate a participar!

APOLONIA

domingo, 22 de enero de 2012

JITANJÁFORA 24: BUKOWSKI

Domingo, 15 de ENERO de 2012
El VIGÉSIMO CUARTO programa. 
BUKOWSKI

Esta vez sí que ha pasado más de un mes desde la última jitanjáfora. Sin recomendaciones de lectura ni retos, porque todos estamos todavía recolocando la entrada de año, y con retraso, porque el primer programa debía haber sido el día uno, pero el programa de la enredadera aquella noche fue intenso y no hubo tiempo. No pasa nada. El día quince pudimos meter en las ondas a Bukowski, aunque se me olvidó decir lo más importante de todo: que sus libros son divertidídimos.

De fondo, el último disco del increíble Jeff Healey : "last call"



DADLE AL PLAY:




CUENTO
(Música de fondo La mer de Debussy )

A TRAVÉS DE LA VENTANA
por Apolonia 

Hace calor, así que me levanto y abro la ventana. Las palomas dejan regalos en la ropa tendida de la tetuda del piso de abajo. Desde que vino a vivir la loca de la melena blanca al piso de arriba, mi salón huele a humedad. Les deja comida en el alfeizar de la ventana y acuden a docenas, dejándolo todo perdido de cagadas. Así que toca tender dentro. Lo prefiero a intentar entenderme con alguien para quien tiene más razón quien más grita.

Casi no puedo abrir los ojos. El sofá es todo mi mundo ahora. La brisa me trae imágenes que querría atrapar, pero se las llevan los vapores de la ginebra. Una pena. Las mejores acuden cuando estoy borracha y en la resaca se quedan. Luego nunca consigo recordarlas, tan apenas sus sombras. La presión en la frente, en las sienes, y la boca seca, son lo de menos. Lo que me molesta en realidad son las palomas. Ellas me han despertado. A través de la ventana abierta me invade ese odioso ruido como de frú-frú exagerado. Cada día vienen más. Sobre todo a estas horas. Amanece. Los comederos a rebosar. Su momento favorito. La oigo moverse por el piso de arriba. Arrastra las zapatillas al caminar. Las llama, les habla, las deja entrar en casa.

He debido dormir un par de horas. Ahora sí que me va a estallar la cabeza, pero por culpa de la tetuda del piso de abajo. Está histérica. A través de la ventana abierta no sólo entran el parloteo de las palomas y el aire fresco. Grita y grita sin parar. Cada uno de sus gritos se me clava como si me dieran un martillazo en lo más alto del cráneo. Vestido, carísimo, zorra, malnacida, ratas con alas, puta, planta favorita, limpiar la terraza. ¡Cállate ya! ¡Joder! Qué no son ni las nueve de la mañana. Qué es domingo. Se va a quedar afónica. Aunque no sé cómo no se le han roto ya las cuerdas vocales de tanto gritar a los que mean en el callejón de madrugada. ¡Qué oído tiene la jodida! Imagino que estará despierta, o andará a medio despertarse, o tiene el sueño más ligero del mundo. Aunque de poco te sirve vocear ¿verdad?, porque a esos tíos, cargaditos de cerveza, les da igual, y les daría igual aunque llamaras al mismísimo hijo del infierno. A través de la ventana escucho como mean, bien a gusto, contra la pared de tu terraza. Tienes la negra con la terraza, entre los meones y las palomas. ¡Vieja loca! ¡Qué te de una apoplejía o algo! Hostia que portazo. Ha debido de desencajar la puerta. Protestan las tripas. Comeré algo. La vieja se ríe. Su risa me llega a través de la ventana abierta. No me gusta. Suena a lata vacía que rebota contra una piedra. Me da grima. Ahora ataque de tos. Eso aún me da más grima.

Qué tarde más vaga. Frente a la tele. Sin enterarme mucho de lo que salía por ella. Agua. Mucha agua. Y chocolate a carretadas. Mañana también me dolerá el estómago. Tengo que dejar de salir hasta tan tarde, que luego el domingo es día nulo y el lunes parezco una zombi en la oficina. Pondré una lavadora, que esto ya está seco. Odio tender dentro de casa. Odio el olor a humedad. Anochece. A estas horas las palomas ya están más tranquilas, pero no me fío. A través de la ventana abierta he sentido un golpe enorme en el piso de arriba, cerca de los comederos. A la vieja se le ha debido de caer algo. Ha sonado fuerte. Y la tetuda debe estar con una sonrisa de oreja a oreja. La mala leche de antes se la ha curado su marido con un “aquí te pillo aquí te mato” en el jardín. A través de la ventana abierta me llegaban los gemidos y el estruendo de platos rotos. Así que ha sido contra la barbacoa. ¿Cara a cara o de espaldas? Pondré una de color, y la siguiente serán las sábanas.

Tengo que acordarme de cambiar el tono del despertador. Este ya casi no me despierta. Me he acostumbrado a él. La cabeza en su sitio y las tripas parece que también. No ha sido para tanto esta vez. Ventilar. Qué bien huele hoy el amanecer. Otra cosa no, pero la tetuda sabe cuidar las flores. A través de la ventana abierta puedo masticar su perfume. Llaman al timbre de la vieja. ¿Quién la llamará todos los días a estas horas? Alguna otra loca. Ahora llenará los comederos y se irá. En poco rato esto se llenará de palomas. Tengo que acordarme de cerrar bien los postigos antes de irme, no se me vaya a colar alguna.

Tarde, como siempre. A ver si me acostumbro a no deleitarme tanto debajo de la ducha. Pero es que es tan buena la sensación del agua caliente desde arriba, por todo el cuerpo, por la cabeza, como una mano gigante que me cubriera entera. Siguen llamando al timbre. Qué raro que la vieja no conteste. Y qué raro que las palomas estén tan calladas. Las oigo revolotear, pero no arman el escándalo de costumbre, aunque ya lo armaron ayer para los restos. Quizás mi borrachera lo exagerase, pero yo diría que ayer vinieron más que nunca y estaban más nerviosas que nunca. A través de la ventana abierta me llegan las voces de la calle. Alguien corre a la parada del bus. Lo coge. Bien. Cierro a cal y canto.

Ha sido un día duro. Echaba de menos mi sofá. La resaca ha aparecido a mitad de mañana y todavía me acompaña. La tetuda y su marido están en el jardín. Él prepara la cena. Ella arregla las plantas. Los miro desde arriba. Abro. Me tiro sobre el sofá. A través de la ventana abierta me llegan sus voces, y el olor del carbón en la barbacoa. La loca que llamaba esta mañana al piso de la vieja de arriba, ha aporreado el timbre hasta que la tetuda ha salido a cogerla de los pelos. Insistía mucho porque todas las mañanas van juntas a buscar la comida para las palomas a no sé donde. Raro, muy raro que no contestara. Han subido las escaleras y han llamado a la puerta. Nada. La loca se ha ido, pero ha vuelto al medio día. Nada. La loca ha vuelto a mitad de tarde, con la policía. La vieja estaba muerta. Caída tonta y golpe en la cabeza. El ruido fuerte de ayer, seguro. Las palomas se habían apoderado del piso y le habían picoteado los ojos. A través de la ventana abierta me llega el olor a suavizante de la colada de la tetuda, que se siente mal por haberle deseado una apoplejía. No le durará mucho el reconcome. Ya puedo volver a tender fuera.


Nos despedimos escuchando "Satin Doll" de Duke Ellington
¡Os espero en la próxima jitanjáfora!

¡¡Besiños!!
APOLONIA

RADIONOVELA INTERACTIVA DE LA ENREDADERA CAPÍTULO 9



 ¡Ya está aquí el NOVENO episodio!
¡y cómo siempre cargado de sorpresas...!, jejeje.
Pero también hemos parado un poquitín... para que todos nos ubiquemos. 

En “La J15MJ: el amor no entiende de clases”, ¡ha pasado de toooodooooo! Desaparecidos, revelaciones, salidas del armario... ¡madre mía! ¡No os lo podéis perder!
En este episodio hacemos repaso, nos centramos en como están las cosas y miramos dentro de la cabeza de los personajes, porque tantas emociones nos hacían perder el hilo a todos.

¡¡A tí, que nos escuchas y lees te toca poner un comentario para decirnos cómo quieres que siga esta historia!! ¡Cualquier aportación será bien recibida! En una semana, cogeremos todas las sugerencias y elaboraremos el 10º episodio. Ya sabes, en la web de la enredadera nos puedes dejar tus ideas.

Si pinchas en la foto irás al enlace de la página web de LA ENREDADERA donde puedes colaborar con nosotr@s.



De momento, te dejo con... tachan tachan... ¡EL NOVENO CAPÍTULO DE LA RADIONOVELA INTERACTIVA DE LA ENREDADERA!

Escucha, escucha...




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APOLONIA

viernes, 13 de enero de 2012

HISTORIAS DE UNA TABERNA


Ilustración de Fernando Falcone

DEDICADO A TODOS MIS COMPAÑEROS DEL GRUPO DE ESCRITORES LIBRES DE LA UNIVERSIDAD POPULAR DE ZARAGOZA Y EN ESPECIAL A LOS QUE NO PUDIERON VENIR A LA CUCHIPANDA DEL VEINTIDÓS DE DICIEMBRE EN EL PANTAGRUEL DE LA CALLE HEROÍSMO

Debo anotar que no se me olvide llamar a José Luis si quiero comprar vino “Protos”, que sabe callarse a tiempo cuando los taberneros no se acuerdan del precio que pagaron, y lo venden regalado. O si necesito consejo para un vestido dorado y complementos en rojo. En caso de que alguien me invitase alguna vez a una fiesta de ese tipo, claro. ¿Mejor rojo con complementos dorados?. Va a ser ninguno, que esos dos colores juntos no me van a quedar bien. Lo que tengo que hacer es no meter en el bolso el libro que me ha prestado Felipe, porque aunque no me importe que los míos se desmochen, y siempre se desmochan en las puntas con el roce de las otras cosas que llevo sueltas, no se lo puedo devolver en malas condiciones.
Aquí estoy, de cuchipanda con mis escritores favoritos, una botella de vino y sendos platos de morcilla y jamón delante. La morcilla me acelera la gula. Me la zamparía toda yo sola, con esa avidez que me caracteriza y que pocos conocen, pero igual se levantaba mi abuela de la tumba para echarme un rapapolvo. Al segundo trago se me trabará la lengua, seguro. Debería hacer como Pilar, que bebe cerveza sin alcohol. Pero no puedo resistirme a una copa. De todos modos, creo que ya he salido ebria de la Universidad popular, como siempre. Las reuniones del taller de escritura me dejan algo mareada, y tan satisfecha como las cenas de Nochebuena, pero sin esa sensación de “ya no puedo más y mañana tendré dolores de parto”. Es más como un momento, nada volátil, de felicidad. La felicidad de estar haciendo lo que me gusta con gente que me gusta. Como el puntito justo de borrachera. Una copa de vino, dos a lo sumo. Aunque seguro que cae la tercera.
Pocas veces nos hemos juntado todos. Hoy ha venido también Rakel, que se ha descolgado porque ha vuelto a estudiar, pero algunos faltan que echo de menos. La familia ha crecido, y más que debería crecer, arropada y protegida por el gusto a las palabras. Pocas historias de taberna tenemos todavía, pero en esta, Pantagruel, tendré que inspirarme para escribir algo. Dicen que Francois Rabelais escribió las historias de ese gigante de voraz apetito con la intención de distraer a sus enfermos melancólicos. El humor es curativo. Y curativa la compañía de José Luis, Pilar, Rakel, Felipe, Aurelio, José y Federico, con los que brindo, no por la Navidad como hacen ellos, sino por la compañía, por la rivalidad cordial, por los festines de cuentos, por la pasión de escribir y por las excentricidades de cada uno. Una pena que cuando se juntan tantos no puedo hablar con todos. Aún así, la sonrisa me va a durar días.
APOLONIA