Nunca se olvida el arte de tejer mundos en las estrellas,
de tener la luna dentro de la cabeza...
y en mi cabecita siempre hay luna llena...

lunes, 28 de febrero de 2011

JITANJÁFORA 9: Sinestesia

Domingo, 27 de Febrero de 2011
El NOVENO programa. 
RETO-EL ESCALÓN
SINESTESIA




Nada mejor para combatir el regreso del frío y el viento que unas risas. Y es que la novena jitanjáfora fue divertida. Teníamos una gran variedad de colaboraciones esta vez. Casi se nos fue el tiempo, pero mereció la pena. Y ahora toca pensar en algo genial para no perder la costumbre y celebrar como es debido que el siguiente será el ¡programa número 10!. Cuando empecé dudaba que pudiera ser capaz de hacer más de uno o dos, pero ¡esto engancha!.





En esta ocasión elegí la música de Wayne Shorter para amenizar las diferentes secciones. Con el "The way you look tonight" de Billie Holliday  de fondo os conté que fue un saxofonista y compositor estadounidense de jazz, de los años 50-60. Nos ha dejado unas melodías cuidadosamente concebidas, complejas y extensas. Muchas se han convertido en standares del jazz.




En nuestro apartado de recomendaciones de libros, continué con los audios robados en el Salón del Cómic de Zaragoza. En esta ocasión XCar de malavida, nos recomendó, haciéndonos reir con su consabido gracejo, "Mientras Agonizo" de William Faulkner.

RETO-EL ESCALÓN
Música de fondo:
Footprints de Wayne Shorter.
Witch Hunt de Wayne Shorter

En la jitanjáfora anterior habíamos pedido que nos enviaséis escalones:  una frase o párrafo que nos atrape y nos haga querer seguir leyendo. Algo sorprendente o que despierte el interés. Algo con, quizás, incluso cierto aire de chisme.

Estas fueron las aportaciones:

1. GOE
Uno que mola es el de Alatriste, "no era el hombre más piadoso ni el más honesto, pero era un hombre valiente" que es como empieza el primer libro.

Bueno, se me ocurre que si escribiera sobre tu hermana podría empezar diciendo: "no pasa de 1'53, y aún así es una de las mujeres más grandes que conozco"

2. E. DÉDALOEnvíado al reto PROSOPOPEYA
El engendro decapitado corría en círculos, salpicando de sangre las paredes. En medio del granero,  era incapaz de salir del cerco que describía aquel monstruo en su carrera. ¿Cómo podía hacerlo? Boquiabierto, miraba su cabeza, todavía en mi mano.
Semejante prodigio era demasiado. Incluso para un pollo sin cabeza.
E. Dédalo.

3. SILVIA IBÁÑEZ CAMBRA
Escrito por Silvia Ibáñez Cambra, autora de "El cementerio de los reflejos" 9 semanas entre los más vendidos de Aragón.

"La lluvia me empapaba mientras observaba el teatro ardiendo. No recordaba como había salido de allí ni porqué ardía, pero al ver mis manos llenas de sangre, pensé que debía huir, a pesar de no saber si el incendio era culpa mía o si había hecho algo todavía peor. Ahí empezó mi nueva vida, al subir al tren sin ser capaz de recordar nada de mi vida hasta ese instante"

4. MARÍA JESÚS NAYA-BURBUJA
OLÉ TUS LIBROS, C/MIGUEL SERVET, 13
“Vine al mundo un día de octubre, mientras mi padre corría maldiciendo bajo una gran tormenta, en busca de Juana la partera.
Cuando llegaron junto a mi madre, Juana apartó la sábana para examinarme y dijo santiguándose: "Virgen, Virgen, esto no es normal".

5. ALEJANDRO CASTRO
Abrí la puerta del Club. Una densa atmósfera de humo impregnaba el ambiente, caldeado por el sonido de la banda de blues que anunciaba el desgastado cartel de la entrada. Los chicos se estaban dejando la piel sobre el escenario, tenían actitud, y sabían hacerlo bien. Varios focos rojos colgaban del techo, y desprendían una tenue luz escarlata. La luz me recordó que se acercaba el momento de acabar con aquel asunto de la manera más sangrienta posible. No había elección. “La Voz” había sido muy clara al respecto: “Muchacho” -me dijo- “Sabes que él terminará siendo mejor que tú… Tiene estilo, y conoce las escalas… ¿Y tú no querrías eso, verdad? ¿No es así, muchacho?”

Saqué mi cartera, pedí un bourbon doble con hielo. Pagué. Miré el escote de la camarera. Un segundo, tal vez dos... Guardé la cartera, encendí un cigarrillo. Sonreí. Entonces, comencé a recordar la primera vez que “La Voz” vino a mí, tras aquel concierto con los “Cuervos Negros” en Nueva Orleans… “¡Buenos tiempos, maldita sea!” Dije entre dientes, mientras aspiraba la vida de mi víctima de nicotina… Luego tocaría aspirar la de otros.

6. DANI GARCÍA NIETOImaginad la más cruel de las batallas, el fuego, los cañonazos, los llantos. Imaginad un millón de muertos. Ahora imaginad que vuelven, hambrientos de cerebros. Ahora que me encuentro al final de mi vida, y con más de cien batallas a mis espaldas, me dispongo a relatar la más extraña, la más increíble y peligrosa de todas mis aventuras: el asedio a la ciudad de Zaragoza en 1808 por un ejército hediondo de cadáveres vivientes.

7. ROBIN JUD"Tiré y tiré del hilo que salía de mi almohada y,... ¡zas!, de repente, me
encontré sentado en tu mecedora”

8. SANTIAGO BLASCOMuchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo.
Cuando empecé a recobrar el conocimiento tuve miedo de que toda aquella sangre fuera mía. Momentos después lo hubiera deseado.

9. V. MONAHAN
"Cristales blandos y agujas romas, abre la puerta, mete la cabeza y asoma."

"¡Esas Tetas! Paco, me pasas la sal por favor." (diálogo entre dos hombres).

10. BOLBORETA FUNKI
Me han tocado las alitas. Mis alitas no se tocan.

11. CHEFOYo quiero beber de tu ataud.

12. XCAR MALAVIDA
De repente,  me despierto en medio de una playa en la que nunca había estado, disfrazado de pollo y esposado a un enano torero. ¿Es pronto para tomar una cerveza?

SINESTESIA

La sinestesia, del griego συν, 'junto', y αισθησία, 'sensación', es la mezcla de varios sentidos. Por ejemplo, oír colores, ver sonidos, y percibir sensaciones gustativas al tocar un objeto con una textura determinada. La sinestesia es un efecto común de algunas drogas psicodélicas, pero no nos vamos a meter en ese tema.

En jitanjáfora nos centraremos en la sinestesia como figura retórica.
La definición que da el diccionario es la siguiente:
Tropo que consiste en enlazar dos imágenes o sensaciones percibidas por distintos órganos sensoriales. Por ej. "... y tenía un olor ácido, como a yodo y a limones." (Industrias y andanzas de Alfanhuí. Rafael Sánchez Ferlosio, Roma, 1927). / Utilización de un adjetivo concreto acompañando un sustantivo abstracto, como "verde esperanza".

En la literatura, además de la mezcla de sensaciones auditivas, visuales, gustativas, olfativas y táctiles, asocia elementos procedentes de los sentidos físicos con sensaciones internas (sentimientos). Se le vincula con la enálage –figura gramatical consistente en cambiar las partes de la oración– y con la metáfora, por lo que a veces recibe el nombre de metáfora sinestésica.

Hay precedentes del uso de este tropo ya en la literatura clásica, como por ejemplo Virgilio. En España fue utilizada por los escritores barrocos. Pero fueron los poetas franceses quienes la pusieron de moda en la lírica, especialmente durante el simbolismo. Por ejemplo, Rimbaud creó un soneto dedicado a las vocales, adjudicando a cada una de ellas un color distintivo, y Rubén Darío hablaba de sonoro marfil o de dulces azules. Esto serían sinestesias de primer grado, ya que son impresiones de dos sentidos corporales diferentes; cuando se asocia la impresión de un sentido del cuerpo no a otra impresión de un sentido diferente, sino a una emoción, un objeto o una idea, hablamos de sinestesia de segundo grado. Por ejemplo: agria melancolía.

¿Sabéis cual es el escritor que la empleó con mayor asiduidad y perfección?. Una pista. Español. Antes de los poetas del 27.
Juan Ramón Jiménez
Es de oro el silencio. La tarde es de cristales azules. JRJ, Hora inmensa
En el cénit azul, una caricia rosa!   JRJ, Elegías lamentables
Por el verdor teñido de melodiosos oros;  JRJ, Elegías lamentables

La sinestesia se utiliza para puede utilizarse para enfatizar una escena, para amplificar las sensaciones de un personaje o incluso para aportar continuidad o discontinuidad al relato.
A mí, por lo que me gusta especialmente este recurso, es porque las asociaciones sinestésicas favorecen la memorización de conceptos abstractos, ya que nos ayudan a vincularlos con realidades sensibles.
Personajes como Charles Baudelaire, Nikolai Rimsky-Korsakov, Vladimir Nabokov, Marcel Proust, Bob Hardy, Alexander Scriabin y Olivier Messiaen, Axel Lovengreen, Justin Chancellor entre otros, poseían esta facultad.

Otro ejemplo:
(El otoño. Luis Cernuda) que fue uno de los poetas más destacados de la generación del 27.
"La atmósfera del verano, densa hasta entonces, se aligeraba y adquiría una acuidad a través de la cual los sonidos eran casi dolorosos, punzando la carne como la espina de una flor. De las hojas mojadas, de la tierra húmeda, brotaba entonces un aroma delicioso, y el agua de la lluvia recogida en el hueco de tu mano tenía el sabor de aquel aroma, ..." ----(El otoño. Luis Cernuda)

CUENTO
(Música de fondo Infant eyes de Wayne Shorter)


El pan de cada día


Foto obtenida de portafolioblog

Desde que soy cartero conozco mucho mejor a mi ex mujer.

Cuando concluye la jornada laboral, el día no ha hecho más que empezar para ella. Termina sus rutinas de trabajo sin prisas ni agobios, con una sonrisa de satisfacción, porque ahora el tiempo será todo suyo. Segura de sí misma se dirigirá hacia casa, animándose a disfrutar del paseo. Le encanta que el eco de sus tacones se escuche por las calles del casco viejo; por eso los hace chocar con fuerza contra los adoquines.

El vaivén de sus caderas, insinuantes a través de la ajustada falda, unido a la voz de sus pies enfundados en medias de seda y zapatos a lo años 60, harán que más de uno se gire a mirarla.

Los tenderos se acercarán a los ventanales en busca de sus sugerentes saludos. De la pastelería saldrá la ronca risa del pastelero, mezclada con el dulce olor a caramelo y chocolate, a la vainilla de la galleta casera, a la canela de la leche merengada. Cuando sacuda su melena ante la puerta, todos los hornos se pondrán a funcionar a un tiempo; la masa del bizcocho se esponjará en una sinfonía de mantequilla y frutas. Un beso de miel será lanzado hacia el interior, y un guiño insinuado hará de trampolín al deseo.

Siempre ha llamado la atención por su imagen trasnochada y glamurosa. Siempre perfecta. Siempre con los labios pintados de rojo. Siempre mirando al frente.

Su alegría es el pan de cada día para el chico de la frutería. El perfume de su pelo hace que la vida tenga sentido todavía para el vendedor del kiosco. Ella, que no es ajena a nada de esto, les regala cada tarde su paseo; se deleita en saborear el placer que le produce su admiración.

Cuando llegue a casa tendrá todavía la sonrisa fresca. Se desnudará despacio frente al espejo, quitándose primero la falda. La gusta ver sus piernas enfundadas en esas medias. Medias de seda de línea perfecta, de costura alineada con sus curvas, hasta medio muslo, ni más ni menos. 

Saboreará el contraste de la negra seda con el blanco inmaculado de su piel, ni siquiera por el sol profanada. Se admirará unos instantes en ropa interior, bajará de sus tacones, soltará el liguero y se quitará las medias como si estuviese en una sesión de fotografía para Elvgren.

Baño perfumado con olor a violetas amenizado con vino blanco y chocolate negro. El ritual de la belleza sin prisas. Su parte favorita es abrir el cajón de arriba, siempre en perfecto orden, repleto de medias negras de seda, envuelta en un albornoz blanco, descalza, mientras tararea un blues. Sonará  el timbre, justo a esa hora de penumbra que precede a la noche cerrada. Ella estará perfecta. Perfecta para que ahora, después de haber seducido a media ciudad, la seduzcan a ella.

Mañana, con las cartas al hombro, volveré a seguirla. Mientras estuvimos casados no supe verla. Nunca me fijé en sus medias de seda negra.


Nos despedimos escuchando "Satin Doll" de Duke Ellington .

¡¡Besiños!!
APOLONIA

martes, 22 de febrero de 2011

RETO: EL ESCALÓN

En "JITANJÁFORA 8" planteé un reto: CREAR UN ESCALÓN.

RETO: El escalón
Óscar Sipán dice que todo cuento debe comenzar con un escalón. Con algo impactante. Con una frase que nos atrape y nos haga querer seguir leyendo. Algo sorprendente o que despierte el interés. Algo con, quizás, incluso cierto aire de chisme.
John Cheveer, en una entrevista para “The Paris Review” dijo que un comienzo para un cuento en el que pensaba muy a menudo era: “El primer día que robé en Tiffany’s estaba lloviendo.”

Propongo que nos mandéis algún escalón que se os ocurra


Foto de Jeezny vía Flickr







Venga, animaos a participar. Todo vale. Dejad volar la imaginación. Ya sabéis que leeré todos los textos en antena. Tenéis de tiempo para enviarlos hasta el  sábado 26 de Febrero. ¡No más de 50 palabras!, para que haya espacio para todos.

Leeré lo que me enviéis en el programa del 27 de Febrero.


¿Qué cómo me los podéis hacer llegar?
Los podéis dejar aquí en forma de comentario, o mandando un mensaje, ya sea a través del facebook (para quienes seáis mis amiguitos), o a través del correo electrónico a cualquiera de las direcciones siguientes, indicando en el asunto "Colaboración Jitanjáfora: prosopopeya":


esencialsiempre@gmail.com
laenredadera@nodo50.org


También podéis dejarlo en la página web de "La enredadera". Tenéis el enlace aquí al ladito, pinchad encima y ya está.


Besiños!!
APOLONIA

JITANJÁFORA 8: Cuentos y cuentistas

Domingo, 13 de Febrero de 2011
El OCTAVO programa. 
CUENTOS Y CUENTISTAS




No me puedo creer que ya lleve ocho programas. Esta vez, al terminar, recibí un consejo que me parece bueno, y que voy a seguir. Y es ¡no ser tan seria! Jajajajajajajajajajajaja
Seguro que Nacho y Pati me ayudan a conseguirlo.





Para no variar, (y para qué variar algo que de momento me sigue gustando y no me cansa) comenzamos con la maravillosa voz de Billie Holiday de fondo. Y repetimos con Debussy, piezas diferentes, pero es que me encanta mostraros las cosas que me emocionan.

En nuestro apartado de recomendaciones de libros, empecé con los audios robados en el Salón del Cómic de Zaragoza. Y el primero ha sido el de Daniel García Nieto, que nos recomendó a Robert E. Howard

Esta vez no hubo colaboraciones, porque no había reto pendiente, pero sí que planteamos uno para el siguiente programa. Pero eso lo dejo para el final.

Caricatura de Borges por Carilho



Tuvimos cuentos y cuentistas con Sirenas de Debussy acunándonos de fondo. Como no se puede hablar de todos ellos en tan poco tiempo, tras introducir el concepto de cuento literario, elegí a Borges. Escuchamos su voz. Maravillosa. Y lo conocimos algo mejor al ritmo de La Mer de Debussy.







Esta vez el  CUENTO  fue cortito: "TRES GOLPES" :
(Música de fondo "Clair de lune" de Debussy)


TRES GOLPES
La calma reinaba en la casa. El sol del mediodía entraba por la ventana de la cocina, dando de lleno en la caja de cartón apoyada en el alféizar que hacía de casa, por el momento, para los tres polluelos. Estaban apretados uno contra otro, delante de una botella pequeña de plástico, llena con agua caliente para hacerles de estufa, que ocupaba casi todo el espacio. Todavía tenían los ojos cerrados. Su piar, aunque continuo, sonaba débil. En una esquina estaba la madre. En silencio amamantaba al bebé que llevaba en brazos, apostada en el camino de la luz, buscando el calor, al ritmo acompasado y lento de la mecedora. Observaba con ternura al hijo mayor, que con las negras hebras de pelo cayendo sobre los ojos, de puntillas para llegar a ver, paseaba los dedos con delicadeza por el plumón de los polluelos. La madre terminó de alimentar al pequeño, se recompuso la ropa y salió susurrándole una nana en busca de la cuna. Todo estaba en silencio, lo que ayudó a que se durmiera enseguida. Mientras lo arropaba, escuchó uno, dos, tres golpes sordos. Tres fuertes golpes que no sabía reconocer, pero que venían de la cocina. Asustada salió a comprobar qué podía haber sido. Quizás su hijo se había hecho daño. Pero no, eso lo habría sentido dentro. Mientras caminaba por el pasillo sintió una corriente fría de aire, lo que le hizo apretar el paso. Se detuvo en la puerta sin poder contener su asombro. La ventana estaba abierta de par en par. El niño, subido en una silla, estaba de pie mirando hacia fuera. Al percatarse de su presencia se giró hacia ella, aún con la botella en la mano, ensangrentada y cubierta de plumas. Sonreía tranquilo. Despacio bajó de la silla, se acercó a su madre, que seguía inmóvil mirándolo como si no lo reconociera, la cogió de la mano y le dijo: “Ya está mami. Ahora ya no nos quitan más, ni a mí ni a mi hermanito, ni el calor ni el aire.”


Nos despedimos escuchando "Satin Doll" de Duke Ellington y planteando el RETO.
RETO: El escalón.
Óscar Sipán dice que todo cuento debe comenzar con un escalón. Con algo impactante. Con una frase que nos atrape y nos haga querer seguir leyendo. Algo sorprendente o que despierte el interés. Algo con, quizás, incluso cierto aire de chisme.
John Cheveer, en una entrevista para “The Paris Review” dijo que un comienzo para un cuento en el que pensaba muy a menudo era: “El primer día que robé en Tiffany’s estaba lloviendo.” Propongo que nuestros colaboradores nos envíen algún escalón que se les ocurra.



¡Espero vuestros escalones!

¡¡Besiños!!
APOLONIA